miércoles, agosto 25, 2010

O ENSINO NO BIERZO DURANTE O ANTIGO RÉXIME (1ª PARTE)


O ENSINO NO BIERZO DURANTE O ANTIGO RÉXIME (1ª PARTE),
Por Xabier Lago Mestre, do colectivo Fala Ceibe do Bierzo.



POLÍTICAS RESTRICTIVAS DO ENSINO POPULAR.
Os mosteiros cistercienses do Noroeste peninsular crean escolas de primeiras letras no século XVIII. Destacan na provincia do Bierzo os grandes mosteiros, o cisterciense de Carracedo e os benedictiños de S. Pedro de Montes e Santo Andrés de Espiñareda. Tomamos o exemplo do mosteiro galego de Oseira no tema do ensino. “Los religiosos cistercienses del monasterio de Osera (…) han dado prueba de su verdadera caridad, disponiendo que la limosna que antes se distribuía a los pobres que acudían a la portería, se aplique de un modo más útil, privando a los mendigos de este verdadero fomento de la hogazanería. A este fin han resuelto establecer con inmediación al monasterio una escuela caritativa en que continuamente se recojan, alimenten y vistan por la comunidad unos cuarenta niños pobres, enseñándoles por tiempo de tres años la doctrina cristina, la lengua castellana, a leer y escribir, pero no la gramática ni otra facultad; de modo que con dicha enseñanza sean restituidos a sus padres a la edad de diez o doce años, que es la competente para que puedan aplicarse a la agricultura, o a las artes y oficios (…)” (Yañez Neira, Fr. D. Continuación de la historia de Fray Tomás de Peralta, Santiago de Compostela, 1997).


Segundo este texto hai intención de fomentar o ensino das primeiras letras entre os neniños pobres. Pero tamén se fixa un tope de idade para estudar, ata os dez ou doce anos, en que deberán deixar a escola e principiar o seu traballo laboral. Xa no século XVII xorde unha política escolar que restrinxía os estudos das clases populares. Así, o arbitrista, Fernández de Navarrete, dicía que “aunque parece rigor quitar a la gente plebeya la ocasión de valer por medio de las letras no lo es, considerada la necesidad que los Reinos tienen de gente que acuda a los ministerios de las armas, la labor de las tierras y el exercicio de las artes y oficios (…)”.


As políticas económica e militar esixía reducir o acceso ao ensino. A crise demográfica reducía os labregos e o seu traballo no sector agrogandeiro. As continuas guerras internacionais nas que participaba a Coroa de España dezmaban a poboación masculina. O propio rei Felipe IV prohibió, en 1623, que houbese estudos de gramática en ciudades e vilas que non tivesen o cargo de corrixidor. Na provincia do Bierzo había corrixidores en Ponferrada, Vilafranca e Bembibre, capitais respectivas da zona realenga, do marquesado do mesmo nome e do condado de Alba de Liste.


Tamén os ilustrados do século XVIII son partidarios do ensino elitista e restrictivo. Un Informe das Sociedades Económicas do País, publicado en 1786, propugnaba que “(los niños) deben aprehender a leer, escribir, contar y dibuixar sin emplear en esto todo el día, antes bien han de ocupar la mayor parte de él en algún trabajo corporal, porque a éste se han de entregar enteramente después; las letras y otras artes en que trabaja más el ingenio, son propias para gente rica (…)”.


Compartindo esta tendencia xeneralizada estaba o Intendente de León, que en 1764 declaraba a incompatibilidade entre o rexurdir das artes, industria e comercio e a abundancia de estudos existentes “porque la ocasión próxima de tenerlos a la mano estimula a muchos padres a dedicar los hijos a estudiar e inclinarlos al estado eclesiástico, secular o regular, sin examen ni pruebas de voación, separándolos de los oficiso y ejercicios que han profesado (…), con daño gravísimo de la sociedad, bien y utilidad general del pueblo “ (R. Kagan, Universidad y sociedad en la Edad Moderna, Tecnos, 1981).

CONTROL POLÍTICO DA COROA SOBRE O ENSINO.
A Coroa intervén firmemente na política educativa. Por Real Cédula de Felipe II (1573) ordénase que ninguén abra escola sen previamente examinar o mestre. “He acordado y mando que de aquí en adelante ninguna persona que haiga sido Maestro de Escuela o quiera serlo, no ponga escuela pública ni la tenga en pueblo ni parte alguna de estos Reynos sin ser primero examinado o por lo menos aprovando para ello (…) y ningún maestro examinado y aprobado enseñe a leer y escribir la Lengua Castellana sino por instrucciones y cartillas impresas de aquí adelante con licencia de los de mi Consejo, so pena de privación de oficio de Maestro por tres años la primera vez que se le provase, y la segunda privación perpetua (…)”. Vemos como se impón o ensino do idioma castellano, mentres que o resto de idiomas romances de España se ignora, entre eles o galego no Bierzo.


O rei Felipe IV prohíbe en 1623 que haxa estudos de gramática nas ciudades e vilas que non tivesen corrixidor. Medida que provocou a reducción drástica do número de centros e forzou a decadencia do ensino (segundo R. García Cárcel, Historia de España, siglo XVIII. La España de los Borbones, Madrid, 2002). Os corrixidores reais tiñan funciois no control do ensino nas ciudades e vilas. “Mando, que en las escuelas se enseñe, además del pequeño y fundamental catecismo que señale el Ordinario de la diócesi, por el Compendio histórico de la religión de Pinton, el Catecismo histórico de Fleury, y algún compendio de historia de la Nación, que señalen respectivamente los corregidores de las cabezas de partido con acuerdo ó dictamen de personas instruidas (…)” (Novísima Recopilación de las Leyes de España, T. IV, p.2, Ley II, 11 de xullo de 1771).


INTERVENCIÓN ECLESIÁSTICA SOBRE O ENSINO.
Nos séculos do Antigo Réxime o monopolio educativo estaba baixo o control do poder eclesiástico. Neste sentido no Bierzo sentíase a grande influencia dos mosteiros, do Bispado de Astorga ou dos curas parroquiais. As visitas dos bispos da diócese de Astorga, recollidas nos libros de fábrica das parroquias, deixan testemuño do seu control ideolóxico. En Pereda de Ancares, aló polo 1769, ordénase aos párrocos que “expliquen todos los días festivos a sus feligreses la doctrina criptiana y Santo Evangelio ponderándoles la fealdad de la culpa de que deven huir y las graves penas del infierno con que serán castigados los trsnsgresores de la ley divina (…)”. Os mestres rurais precisaban de licencia do bispo para poder exercer a súa profesión na provincia berciana. En 1756, en Valboa, “y que bajo las mismas penas no permita que en sus feligresías se enseñe gramática ni moral por persona alguna que se a eclesiástico secular, ni por pretexto alguno sin expresa licencia nuestra (…)” (Textos tirados de José A. Balboa de Paz, La educación en El Bierzo. De las escuelas monacales a los centros universitarios, 2006).

O Bierzo, agosto de 2010
www.obierzoceibe.blogspot.com
www.facebook.com/xabierlagomestre
www.blogoteca.com/obierzoxa
http://www.ciberirmandade.org/falaceive
www.partidodelbierzo.com

Etiquetas: , , ,

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

La imagen ya lo dice todo. Debíais de ir de cara y dar a conocer al público vuestras verdaderas aspiraciones, la integración de El Bierzo en Galicia.

Carucedo o Vega de Valcarce no sería algo muy traumático, pero ¿qué pintarían en Galicia pueblos como Rozuelo, Matalavilla o Espina de Tremor?

6:06 a. m.  

Publicar un comentario

<< Home